Normalmente, el moco fluye libremente a través de los conductos sinusales, lavando el polvo, los contaminantes y las bacterias.
Luego, el moco pasa a través de la garganta y al estómago, donde se eliminan los irritantes o bacterias. Este es un proceso natural. La mayoría de las personas tragan mucosidad durante todo el día sin siquiera darse cuenta.
A veces, su cuerpo necesita producir más moco de lo normal para lubricar y limpiar su sistema sinusal. Eso puede significar que el moco que produce su cuerpo se vuelve más pegajoso y gomoso.
Esto sucede porque las membranas de la nariz se quedan sin humedad para hacer que el moco sea acuoso y transparente.
Cuando el moco está seco y pegajoso, el moco puede comenzar a acumularse en la parte posterior de la garganta. Esto se denomina goteo posnasal. Puede sentirse como una obstrucción o un tapón en los senos paranasales.
Aquí hay algunas causas comunes de moco espeso y pegajoso.
Clima seco
Un clima seco puede hacer que los conductos sinusales sean más secos de lo que serían normalmente, lo que resulta en moco espeso y pegajoso.
Infecciones de las vías respiratorias superiores
Las infecciones bacterianas y virales hacen que la nariz y los senos paranasales produzcan exceso de moco. Este moco extra intenta eliminar las bacterias que causan la infección a medida que su cuerpo lucha contra ella.
A veces, el moco se vuelve amarillo o verde a medida que el cuerpo intenta atrapar la infección, produciendo pus.
Estos trozos duros y gomosos de moco también pueden estar teñidos con un poco de sangre. Esto se debe a que las membranas mucosas son sensibles y sangran ligeramente cuando se desprenden estos trozos duros de moco.
Rinosinusitis fúngica
Las infecciones fúngicas también pueden irritar la nariz y hacer que el moco tenga la consistencia de goma.
La rinosinusitis fúngica se refiere a un grupo de infecciones fúngicas que pueden causar este síntoma. En el caso de estas afecciones, el moco adquiere un color dorado mientras su cuerpo trabaja para combatir la infección micótica.
Alergias
Las alergias hacen que los senos paranasales trabajen horas extras para producir moco adicional que elimina los alérgenos.
El exceso de producción de moco puede provocar que se acumulen trozos pegajosos y gomosos de moco hacia la parte posterior de la garganta y dentro de la nariz.
Deshidratación
Si su cuerpo no está lo suficientemente hidratado, sus senos paranasales no tendrán la lubricación necesaria para mantener su mucosidad en una consistencia más fina.
A veces, el ejercicio extenuante, la sudoración excesiva y pasar tiempo al aire libre a altas temperaturas pueden deshidratar rápidamente el cuerpo, lo que produce moco espeso y gomoso.