¿Recuerdas cuando prometimos mantener nuestras nuevas y perfectamente crujientes Keds con el tono blanco brillante más nevoso? Por desgracia, nuestros intentos fueron en vano, y después de golpear el pavimento miles de veces más, nos quedamos con más de un gris salpicado de barro. No te preocupes, querido amigo, porque tenemos una solución que restaurará tus queridas patadas a su antigua gloria de alabastro.
Lo que necesitas: 1 cucharada de bicarbonato de sodio, 1/2 cucharada de peróxido de hidrógeno, 1/2 cucharada de agua tibia y un cepillo de fregar pequeño (o uno de esos cepillos de dientes gratuitos del dentista).
Qué hacer: Mezclar los ingredientes y, a continuación, aplicar la pasta con el pincel. Frote suavemente cualquier mancha o decoloración y deje reposar la solución durante 30 minutos. Enjuague con agua y voilà—patadas blancas brillantes.
Por qué funciona: El peróxido de hidrógeno es un blanqueador sin cloro que, cuando se combina con bicarbonato de sodio, forma burbujas que pueden eliminar manchas y limpiar telas.
¿No tienes tiempo de romper el codo por todas partes? Concéntrate solo en las suelas de goma rayadas y toma una goma de borrar mágica para obtener una solución rápida cuando estés en apuros. (Y dale las gracias a nuestro novio, el Sr. Limpio, de paso.)