La resiliencia es el factor de la «bola de goma»: la capacidad de recuperarse en caso de adversidad.
Ponga simplemente, la resiliencia es la capacidad para afrontar y superar los inevitables desafíos, los problemas y los obstáculos que encontrarás en el curso de su vida, y volver más fuerte de ellos.
La resiliencia se basa en diferentes habilidades y se basa en varias fuentes de ayuda, incluidas las habilidades de pensamiento racional, la salud física y mental y sus relaciones con quienes lo rodean.
La resiliencia no se trata necesariamente de superar grandes desafíos; cada uno de nosotros enfrenta muchos desafíos a diario para los que debemos aprovechar nuestras reservas de resiliencia.
Cuatro Ingredientes de Resiliencia
Hay cuatro ingredientes básicos para la resiliencia:
- Conciencia-notar lo que está pasando a tu alrededor y dentro de tu cabeza;
- Pensar-ser capaz de interpretar los eventos que están sucediendo de una manera racional;
- Tender la mano: cómo llamamos a los demás para que nos ayuden a enfrentar los desafíos que enfrentamos, porque la resiliencia también consiste en saber cuándo pedir ayuda; y
- Fitness: nuestra capacidad mental y física para hacer frente a los desafíos sin enfermarnos.
El vínculo entre el Pensamiento y la Emoción
Nuestra página sobre el Reconocimiento y el manejo de las Emociones habla sobre la importancia de aplicar la razón a la emoción para apoyar su toma de decisiones. Pero la forma en que piensas puede verse afectada por tu respuesta emocional a la situación, y parte de ser consciente es comprender esto y reconocerlo cuando sucede.
El psicólogo Albert Ellis creó un modelo simple para esto, que llamó A-B – C para Adversidad – Creencias-Consecuencias. Este modelo establece un proceso:
Como deja claro nuestra página sobre el manejo de las emociones, a veces una emoción es tan visceral que no hay tiempo para pasar por este proceso racionalmente: simplemente reaccionas inmediatamente a la situación huyendo, gritando o algo similar. Pero es casi seguro que tu cerebro ha pasado por el proceso inconscientemente.
también es importante reconocer que ciertos pensamientos conducen a ciertas emociones.
Ejemplo Incluyen: | |
He perdido algo | Tristeza |
Alguien ha hecho algo para dañarme | Ira |
He herido a alguien | Vergüenza |
Me siento amenazado por algo | Miedo |
El beneficio de entender que estos pensamientos conducen a estas emociones particulares es que al identificar la emoción que sentimos, podemos entender lo que pueden ser nuestros procesos de pensamiento subconsciente. De lo contrario, esto puede no ser obvio, y nos ayudará a tomar las medidas adecuadas para abordar el problema.
Trampas para pensar
Las llamadas ‘trampas para pensar’ son trampas en las que podemos caer en nuestro pensamiento, generalmente en la etapa ‘B’ del modelo A-B-C de arriba.
Las trampas de pensamiento son suposiciones efectivas sobre nosotros mismos o la situación, hechas sin examinar la evidencia, y generalmente no ayudan.
Los signos de que estás cayendo en una de las trampas del pensamiento incluyen el uso de frases como ‘nunca’, ‘siempre’ y ‘Yo they ellos they’, por ejemplo:
- «Simplemente no puedo hacer matemáticas»
- «Nunca he podido hacer cosas así»
- «Me lo han quitado»
Si estás pensando que este lenguaje suena muy infantil, tienes razón. Echa un vistazo a nuestra página sobre Análisis Transaccional para entender más.
Usted necesita estar alerta a caer en una o más de estas trampas de pensamiento cuando está desarrollando sus creencias sobre una situación porque podría impedirle actuar de manera efectiva: en otras palabras, las trampas de pensamiento pueden impedirle actuar con resiliencia.
Mejorar la resiliencia a través del pensamiento
Después de haber considerado los elementos de la resiliencia y el proceso de respuesta a las situaciones, ahora puede ser útil hablar sobre lo que podemos hacer para ayudar a desarrollar la resiliencia.
Aquí hay un buen número de técnicas útiles, que incluyen:
Recopilar más información
Desea involucrar a la parte racional de su cerebro en la toma de decisiones sobre la situación.
Una de las mejores maneras de hacerlo es recopilar activamente más información en la que basar su decisión. (Consulte nuestras páginas sobre Toma de decisiones para obtener consejos y consejos más generales).
Ejemplo
Suponga que ve una serpiente al lado del camino. Tu reacción inmediata podría ser miedo:
«¡Una serpiente! Debe ser venenosas! ¡Será mejor que huya!»
Pero haga una pausa por un momento y reúna más información. Podría estar muerto. Puede que no sea venenoso. Puede ser frío y, por lo tanto, solo puede moverse muy lentamente.
Hay todo tipo de razones por las que es posible que no tengas que huir.
Un aspecto crucial de reunir más información es pensar en explicaciones alternativas para la situación.
Su cerebro, basado en su experiencia y su sistema de creencias, le presentará lo que considera la explicación más obvia.
¡Pero puede que no sea correcto!
Pensar en alternativas y luego compararlas con la realidad, tal vez haciendo preguntas a los demás o buscando algo, ayudará a garantizar que reacciones adecuadamente a la situación.
Escenarios alternativos
Todos somos propensos a imaginar lo peor.
Tu jefe pide hablar contigo, e inmediatamente imaginas que estás a punto de ser despedido. Te preparas para defender tu actuación reciente
but pero cuando entras en su oficina, resulta que ella quiere que sepas que está embarazada y que estás en línea para asumir sus responsabilidades mientras está de baja por maternidad, con el consiguiente aumento salarial.
El maestro de su hijo le pide una palabra rápida después de la escuela. Inmediatamente asumes que el niño está en problemas
but pero no, simplemente se cayeron y se cortaron una rodilla a la hora del almuerzo. No ha pasado nada, pero la escuela tiene que avisarte.
Imaginar lo peor también se llama catastrofización, y es sorprendentemente común.
Hay una manera muy fácil de lidiar con esto, que implica generar escenarios alternativos en tu cabeza:
- Imagina lo peor: deja volar tu imaginación. ¿Qué podría haber salido mal? ¿Qué pudo haber pasado?
- Ahora piensa en los mejores resultados posibles. Cómo podría ser?
- Finalmente, piense en los resultados más probables, probablemente en algún lugar entre los dos. Haga un plan de cómo responderá a eso.
Estas dos estrategias, la recopilación de más información y la búsqueda de escenarios alternativos, le ayudarán a desarrollar su resiliencia.
Te volverás más consciente de lo que está pasando a tu alrededor y dentro de tu cabeza (conciencia). También te ayudarán a aplicar el pensamiento racional a la situación, a salir de cualquier trampa de pensamiento en la que hayas caído, y a comprender y racionalizar tu respuesta emocional a una situación.
Mejorar la resiliencia Al llegar a
Ningún hombre es una isla, en sí misma. Cada hombre es un pedazo del continente, una parte de la principal…
John Donne (Poeta inglés)
no Hay vergüenza en pedir ayuda. Todos necesitamos ayuda de vez en cuando, y muchos de nosotros funcionamos mucho mejor cuando trabajamos con otros.
Una buena parte de la resiliencia es saber cuándo y cómo pedir ayuda a los demás, llegar a aquellos con quienes tenemos relaciones para resolver los problemas con apoyo.
Eche un vistazo a nuestra página sobre Análisis Transaccional para explorar cómo puede pedir ayuda como adulto, en lugar de sentir que está volviendo al estado de «niño» al hacerlo.
Mejorar el estado físico y la Salud
El elemento final de la resiliencia es la salud física y mental.
Eche un vistazo a nuestras otras páginas de habilidades personales para explorar más sobre cómo puede mejorar su salud, por ejemplo, comprendiendo los vínculos entre la dieta y el estrés, y reconociendo la importancia del sueño y el ejercicio
Lectura adicional de Habilidades Que Necesitas
Las Habilidades que Necesitas Guía para la Vida: Vivir Bien, Vivir Éticamente
Cuidar de tu salud física y mental es importante. Sin embargo, no es suficiente. La famosa jerarquía de necesidades de Maslow sugiere que la mayoría de nosotros necesitamos más que eso. Necesitamos saber que estamos viviendo nuestra «mejor vida»: que estamos haciendo todo lo posible para llevar una «buena vida» de la que no nos arrepentiremos más adelante.
Basado en algunos de nuestros contenidos más populares, este libro electrónico te ayudará a vivir esa vida. Explica los conceptos de vivir bien y «bondad», junto con cómo desarrollar su propia «brújula moral».
Conclusión
la Resiliencia es un polifacético capacidad.