Objetivo: La esquizofrenia es un trastorno mental devastador acompañado de una conectividad cerebral estructural aberrante. La pregunta de si la esquizofrenia es un trastorno cerebral progresivo aún no se ha resuelto. Por lo tanto, no está claro cuándo ocurren estas alteraciones estructurales y cómo se desarrollan con el tiempo.
Métodos: En nuestra revisión selectiva, resumimos los hallazgos recientes de estudios de imágenes por resonancia magnética longitudinal que investigan alteraciones cerebrales estructurales y su impacto en el resultado clínico en diferentes etapas de la enfermedad: (1) sujetos con un riesgo ultra alto de desarrollar psicosis, (2) pacientes con un primer episodio de psicosis y (3) pacientes con enfermedades crónicas. Además, revisamos estudios que examinan los efectos longitudinales de los medicamentos sobre la estructura cerebral en pacientes con esquizofrenia.
Resultados: (1) Los estudios desde los estadios preclínicos hasta la conversión mostraron una pérdida de materia gris cortical más pronunciada (es decir, regiones temporales superiores e frontales inferiores) en aquellos individuos que luego hicieron la transición a la psicosis. (2) Los estudios que investigaron a pacientes con un primer episodio de psicosis revelaron una disminución en múltiples regiones de materia gris (es decir, regiones frontales y tálamo) con el tiempo, así como un adelgazamiento cortical progresivo en la corteza frontal superior e inferior. (3) Los estudios centrados en pacientes con esquizofrenia crónica mostraron que la materia gris disminuyó en mayor medida (es decir, áreas frontales y temporales, tálamo y cortezas cinguladas), especialmente en pacientes con resultados deficientes. Muy pocos estudios informaron efectos sobre la microestructura de la materia blanca en el curso longitudinal de la enfermedad.
Conclusión: Existe evidencia adecuada que sugiere que la esquizofrenia está asociada con anomalías progresivas de la materia gris, particularmente durante las etapas iniciales de la enfermedad. Sin embargo, las relaciones causales entre los cambios estructurales y el curso de la enfermedad, especialmente en pacientes crónicos, deben interpretarse con precaución. Los hallazgos pueden confundirse por períodos de tratamiento más largos y dosis más altas de antipsicóticos o epifenómenos relacionados con la enfermedad.