Cuando un miembro de la familia está luchando con problemas relacionados con el alcohol, no solo afecta su propio bienestar; también puede tener un profundo impacto en su familia. Vivir con abuso de alcohol o dependencia del alcohol puede afectar a los cónyuges, los hijos y otros miembros de la familia.
Hijos de alcohólicos
Los hijos de alcohólicos tienen un mayor riesgo de desarrollar trastorno de estrés postraumático (TEPT), experimentar un trauma de salud mental y tienen una mayor posibilidad de desarrollar un trastorno por abuso de sustancias, según la Organización de Servicio Mundial para Niños Adultos de Alcohólicos.
«Un niño puede verse obligado a comportarse de maneras que van más allá de sus años y asumir responsabilidades que pueden ser mentalmente avanzadas para él, pero no tienen la opción de declinar», le dice a WebMD Connect to Care Lawrence Weinstein, MD, Director Médico de American Addiction Centers. «La ira, los sentimientos de abandono y la desconfianza general pueden desarrollarse durante el consumo de alcohol y/o sustancias por parte de los padres, y pueden afectarlos por el resto de sus vidas.»
El alcohol y la ira pueden llevar a la violencia doméstica, que puede tener un efecto adicional más adelante en la vida del niño. Según Weinstein, incluso puede dar forma a la forma en que el niño se convierte en padre, lo que hace que sean sobreprotectores o autoritarios con sus propios hijos.
Cónyuges de alcohólicos
Vivir con un cónyuge alcohólico también produce otro conjunto de problemas traumáticos. Las personas cuyo compañero de vida está luchando con el trastorno por consumo de alcohol pueden experimentar miedo por su propia seguridad, su futuro o su familia.
De acuerdo con American Addiction Centers, alguien que está tratando con un cónyuge alcohólico puede:
- Culparse a sí mismo por el problema.
- Tomar personalmente.
- Intente controlarlo o curarlo.
- Cubrir el problema a los demás.
- Aceptar comportamientos inapropiados hacia sí mismos, como la ira o la violencia doméstica.
El alcohol también destruye a las familias de otras maneras, especialmente si el alcohólico está luchando con las finanzas y la inestabilidad laboral relacionada con su consumo de alcohol.
Apoyo para familias de alcohólicos
Hay muchas opciones de tratamiento disponibles para los alcohólicos como individuos, pero las familias también tienen muchas opciones para curarse.
Programas de Apoyo Mutuo
Los grupos como Al-Anon, Ala-Teen y ACA/ACOA son programas de apoyo mutuo para personas cuyas vidas se han visto afectadas por la bebida de otra persona. Al compartir experiencias en común, las familias y los amigos pueden traer cambios positivos a sus situaciones individuales, ya sea que el alcohólico esté listo para el cambio o no.
Tratamientos Conductuales
El asesoramiento sobre alcohol existe no solo para el alcohólico, sino también para los miembros de la familia. El asesoramiento conyugal y familiar puede ayudar a un alcohólico de la familia a mantener la abstinencia.
Intervenciones formales
De acuerdo con la Clínica Mayo, una intervención puede ayudar a motivar a alguien a buscar ayuda para su problema de sustancias. Implica reunir a amigos, familiares, compañeros de trabajo y familiares preocupados en un intento de convencer a la persona de que busque tratamiento para su problema.